Ganar elecciones y lograr una transición de poder no es suficiente. Es fundamental tener claro el propósito de la gestión administrativa.
La primera tarea fue completar la reconstrucción de la estructura institucional de la República. El régimen imperante en Venezuela ha destruido todas las instituciones. Necesitamos un gobierno que gobierne, un Congreso que legisle y controle la marcha de la gestión pública, una administración judicial independiente y autónoma, un órgano de control para fiscalizar, un Ministerio Público con derecho a hacer su trabajo y un Consejo Nacional Electoral de confianza. de todos los ciudadanos.
El segundo punto es la recuperación de la economía venezolana. Terminar con la inflación y la recesión. Una economía que produzca bienes y servicios demandados, creando empleos modernos, productivos y bien remunerados. Y riqueza y oportunidad para todos los ciudadanos.
El tercer punto es lograr una Democracia libre de pobreza. Superar la pobreza es una prioridad para Venezuela en los próximos años. Ese objetivo se logra con una educación cada vez mejor. Educación de calidad para los hijos de las familias más pobres. Educación para el trabajo. Invertir en la creación de empleos y oportunidades y en la formación de los jóvenes para que puedan acceder a trabajos estables y bien remunerados.
El cuarto punto para la siguiente fase es abordar los servicios públicos: agua, electricidad, gasolina, transporte, seguridad, educación, salud, saneamiento urbano, internet y comunicación. Todos estos servicios públicos están relacionados con la calidad de vida. Los venezolanos tienen derecho a servicios públicos modernos y eficientes. Al reintegrar a Venezuela a la comunidad financiera internacional, podemos tener los recursos para lograr servicios públicos para todos los venezolanos.
Finalmente, proponemos el fin de la corrupción. Para ello es imprescindible un gran esfuerzo educativo en valores y principios. Además, las sanciones ejemplares contra quienes corrompen y, en última instancia, la reducción del tamaño del estado para eliminar los obstáculos burocráticos y las alcabalas brindan oportunidades para que la corrupción desaparezca.
Venezuela tiene un futuro y ese futuro depende de tener un buen gobierno, un buen programa y un ambiente de reconciliación nacional para generar cambios.
Seguiremos hablando.
