La Federación de Cámaras y Empresas de Venezuela (FedIndustria) participará en la discusión del proyecto de ley especial sobre aportes empresariales a la protección de pensiones que fue presentado ayer por la vicepresidenta Delci Rodríguez ante la Asamblea Nacional y que fue aprobado en primera discusión.
El Director Nacional de FedIndustria, Alcides Kayama, recordó que en 2023, para la discusión de proyectos legislativos, se invitó a debatir a los diferentes sectores del país para dar su aporte, por lo que esperan que se siga el mismo procedimiento para este instrumento legislativo.
“Y ahí vamos a ir los empresarios, el caso que representamos, y vamos a aportar todas las ideas y lo que pensamos a esa legislación”, añadió.
Sin embargo, aclaró que están a la espera de más información sobre el contenido del instrumento legal, qué porcentaje de propuestas hay (tanto de empleado como de empleador) y hacer propuestas en base a eso.
Consultado por el Ejecutivo venezolano sobre el aumento del ingreso mínimo integral, que alcanzó los $130, el dirigente sindical aseguró que esperarán a que el Diario Oficial “tenga claro cómo se distribuirá”.
Sin embargo, destacó que el aumento es “bueno”, ya que los trabajadores recibirán un poco más de dinero. “También aumentará el poder adquisitivo del trabajo, y al aumentar el poder adquisitivo del trabajador, la economía comienza a recibir una mayor cantidad de dinero que la impulsa y fortalece”.
Recordó que FedIndustria propuso aumentos graduales al Gobierno nacional, tal como lo hicieron los demás actores de la comisión tripartita (gobierno, empresa y clase trabajadora) en las reuniones que mantuvieron periódicamente.
“Cada empresa es un mundo diferente. Algunos sectores como el sector salud, el sector tecnológico, el sector agroalimentario han crecido en nuestra economía; De modo que las empresas que obtienen más financiación, porque venden más, pueden pagar mejor. Las empresas que reciben menos pueden pagar menos. El gobierno es el mayor empleador del país”, afirmó.
También aseguró que las sanciones impuestas por EE.UU. al país han afectado tanto a empresas como a trabajadores.
“Les voy a poner un ejemplo claro de empresas. Cuando las empresas industriales necesitan importar y pagar a sus proveedores en el extranjero, no pueden pasar por el banco central a través del (sistema) SWIFT, tienen que buscar otras formas mucho más caras de realizar estos pagos, lo que los hace más caros. Las empresas caras pagan a sus proveedores, lo que encarece el producto final”, añadió.