Nicolás Maduro, presidente de la República Bolivariana de Venezuela, dijo en la XXIII Cumbre del ALBA-TCP que este organismo fue el único que logró salvar a Venezuela de una invasión preparada dentro de la Organización de Estados Americanos (OEA). Las actividades realizadas por el desaparecido Grupo de Lima bajo la tutela de EE.UU.
El jefe de Estado afirmó que “el ALBA salvó a Venezuela de la locura de invadirnos”, lo cual fue exigido por algunos representantes de la extrema derecha del país en 2018 y repetido por gobiernos de derecha en algunos países. El Grupo de Lima incluye a Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú.
En este sentido, Maduro recordó que el entonces gobierno de Colombia, encabezado por Iván Duque, y Brasil, encabezado por Jair Bolsonaro, estaban dispuestos a invadir Venezuela por el sur y el oeste, bajo el mando de Estados Unidos y la manipulada OEA. Sin embargo, la voluntad decidida de los países del ALBA logró frenar estas acciones.
El mandatario nacional afirmó que estas amenazas contra Venezuela, sumada a las medidas coercitivas, sirven para diversificar la economía del país y eliminar la dependencia del país del petróleo. “Como resultado de las sanciones impuestas por Estados Unidos, hemos aprendido a hacer muchas cosas sin hacer nada”, afirmó.
Sobre quienes piden sanciones y ocupación de Venezuela, dijo que algunos de ellos ya no están en el poder en sus propios países y que el Grupo de Lima ya es parte de la historia. A quienes lo quieren desde su propio país les dijo que el pueblo les dará una gran lección en las elecciones.
“Este pueblo se está preparando para dar una lección histórica a las derechas que llaman a la ocupación de Venezuela, piden sanciones y sirven a sus propios intereses”, dijo.
El Presidente advirtió en este punto que habría un resurgimiento del fascismo en algunas partes de nuestro continente y por ello invitó a que esta discusión se realice en cada uno de los países del ALBA-TCP.
Asimismo, invitó a promover debates que alerten sobre el peligro de la extrema derecha que amenaza la soberanía de nuestro continente.
