El Banco Universal de Venezuela, que representa el 99% de la deuda del país, lleva 27 semanas sin poder hacer frente a los encajes legales requeridos por el Banco Central de Venezuela (BCV), generando un déficit de más de 10.000 millones de bolívares semanales.
La reserva legal es el porcentaje de los depósitos que los bancos están obligados a mantener como reservas en el BCV para garantizar la solvencia del sistema financiero. En Venezuela, el encaje mínimo legal es del 73%, pero en la práctica supera el 100%, lo que significa que los bancos deben dejar en el BCV más dinero del que reciben de sus clientes.
Esta situación ha creado una escasez de liquidez en el mercado bancario, que se ha reflejado en el aumento de las actividades de financiación de corto plazo entre los bancos conocidas como night. Estas operaciones aumentaron un 357,39% en enero de 2024 respecto al mismo mes de 2023 y negociaron tipos de interés muy elevados, que alcanzaron el 121% el mes pasado.
El encaje legal en Venezuela es el más alto de América Latina, donde la mayoría de los países han flexibilizado la medida para impulsar el crecimiento económico en medio de la pandemia de Covid-19. Por ejemplo, la reserva legal varía entre el 3,5% y el 8% en Colombia, el 15% en Brasil, entre el 3,6% y el 9% en Chile, el 45% en Argentina, el 5% al 9% en Perú, el 50% en Panamá. , 10,6% para depósitos en moneda local y 20% para depósitos en moneda extranjera en República Dominicana, 2% a 7% en Uruguay y 0% en México.
Según informes bancarios y empresariales, el objetivo del gobierno venezolano con altas reservas legales es el tipo de cambio y la inflación, que han alcanzado niveles hiperinflacionarios en los últimos años. Sin embargo, esta medida también tiene un impacto negativo en el crecimiento económico, ya que limita la capacidad de los bancos para prestar al sector productivo.