La llegada de la selección venezolana de fútbol procedente de Perú sufrió un importante revés. Luego de dos fechas FIFA exitosas en el estadio Las aventuras vividas durante su regreso provocaron conflicto e inquietud tanto en la delegación como en el país anfitrión.
Retrasos y esperas en Perú: :
Después del partido en Lima La salida estaba prevista para las 11:00 horas, pero el avión enfrentó una larga espera por problemas de reabastecimiento de combustible en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, despegando finalmente a las 14:30 horas con destino a Maiquetía.
Llegada y Recepción en Venezuela:
El avión aterrizó en suelo venezolano poco después de las 20:00 horas, con la presencia de integrantes del equipo y futbolistas como Alexander González, Christian Makoun, Alain Baroja, Miguel Navarro y Jefferson Savarino, a pesar de las complicaciones. Pero fueron recibidos por cientos de seguidores que le mostraron su apoyo tras su destacada actuación en los playoffs.
Disputas y quejas:
Sin embargo, el viaje se vio empañado por acusaciones de Venezuela contra Perú. Caracas señaló al gobierno peruano restricciones que impedían repostar combustible. Vinculación de estos inconvenientes al supuesto trato injusto y agresiones a algunos jugadores por parte de la policía local.
El acogedor hogar de la Vinotinto es el epítome de la emoción. Es imperativo que el conflicto diplomático no afecte al estadio. Abandonando las diferencias políticas En la competencia futura, debe garantizarse la cooperación entre países. Evitar que situaciones ajenas al deporte afecten el desarrollo de la competición y la integridad de los jugadores. Unidad y apoyo de la afición. Aunque es valioso Pero no debería verse eclipsado por inconvenientes no deportivos. Es necesario aislar al fútbol de posibles disputas entre gobiernos para proteger la esencia del deporte y el bienestar de quienes lo practican.