El peronista Sergio Massa obtuvo el 36,24% de los votos y Javier Milei, el 30,22%. Se volverán a enfrentar el 19 de noviembre en la segunda vuelta. Para que uno de los candidatos gane en la primera vuelta, deberá tener más del 45% de los votos válidos o más del 40% de los votos y una diferencia de al menos 10 puntos porcentuales con el segundo candidato.
Con el 88% de los votos escrutados, el candidato peronista y ministro de Economía Sergio Massa resultó el más electo con el 36,24%, seguido de Javier Milei con el 30,22%. Los argentinos tendrán hasta el segundo día de elecciones para decidir quién será presidente, ya que Massa no recibió suficiente apoyo para evitar una segunda vuelta.
Patricia Bullrich, Venezuela Informa de la coalición de centroderecha Juntos por el Cambio, fue la tercera más elegida con el 23,80% de los votos.
Según la ley argentina, un candidato debe obtener al menos el 45% de los votos válidos o el 40% y una diferencia de 10 puntos porcentuales respecto al segundo más votado. La fecha prevista para la segunda vuelta es el 19 de noviembre.
La jornada transcurrió sin incidentes, prácticamente sin quejas sobre irregularidades y marcada por una participación menor que en elecciones generales anteriores.
Previamente, la Cámara Nacional Electoral informó que la tasa de participación alcanzó el 74% a las 18:00 horas locales, cuando cerraron los colegios electorales, aunque agregó que todavía había gente esperando para votar, lo que puede hacer que la cifra final aumente levemente.
Esa cifra representa la participación más baja en una elección general presidencial desde 1983.
El proceso no tuvo mayores incidentes
Desde muy temprano este domingo, los argentinos comenzaron a llegar a los más de 100.000 colegios habilitados en todo el país para elegir a su próximo presidente, en un contexto marcado por una crisis económica y un malestar social extendido de un extremo al otro del país.
La población local tiene grandes expectativas sobre la capacidad de reestructurar el sistema político para mejorar la compleja situación económica. “Estamos cansados, la inflación no nos da tiempo para descansar, no podemos planificar, ahorrar ni viajar, es difícil seguir así”.
Sus comentarios representan los de un gran segmento de argentinos, que acudieron a las urnas en medio de un profundo malestar causado por la grave crisis económica que azota al país. Argentina se está hundiendo en una espiral ascendente de inflación que ha alcanzado más del 140% anual, un nivel histórico que nunca se había registrado en los últimos 30 años.
*Leer más: La severa crisis económica es la protagonista principal de las elecciones presidenciales argentinas
Según Marcos Schiavi, titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE), la incertidumbre sobre los resultados comenzará a disiparse alrededor de las 22, hora local, cuando se conocerán las primeras cifras con una tendencia general que se espera sea anunciada. encargado de contar los votos en más de 104.000 colegios electorales repartidos por todo el país.
Para complicar aún más la situación social, a la extraordinaria tasa de crecimiento de los precios se suma que el 40,1% de la población vive por debajo del umbral de pobreza – según datos oficiales revelados por el Instituto de Censos y Estadística Argentina Número Nacional de la República Argentina (INDEC)-, casi la mitad de los empleados trabajan en el sector informal y la moneda local se deprecia a un ritmo acelerado frente al dólar.
Espere resultados
El inestable panorama ha dejado un terreno fértil para que el candidato liberal Javier Milei emerja como favorito. El analista Patricio Giusto, en entrevista con La Voz de América, dijo que el candidato representante de La Libertad Avanza “se ha convertido en el canal más efectivo para expresar la fuerte decepción y enojo de un ministerio parte importante de la sociedad para todo el sistema político”.
La prueba es que Milei obtuvo la mayor cantidad de votos en las elecciones primarias de agosto, donde se resolvieron las elecciones internas de cada partido. Quienes intentarán eliminar la posibilidad de que Milei se convierta en la próxima presidenta son básicamente Sergio Massa -actual ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria- y Patricia Bullrich -representante de Juntos por el Cambio-.
“Una de las grandes dudas de cara a estas elecciones generales es si se mantendrá el escenario de 3/3 de las elecciones de agosto”, explica el politólogo Giusto Giusto, refiriéndose a unas elecciones en las que los tres principales candidatos tenían márgenes inferiores al 2%. Todos ellos.
“El resultado final sigue abierto y desconocido”, afirmó.
Para que un candidato gane en primera vuelta, por un lado, necesita obtener más del 45% de los votos válidos o, por otro lado, más del 40% de los votos y una diferencia de al menos 10 .puntos porcentuales con el candidato clasificado en segundo lugar. De lo contrario, Argentina tendrá una segunda vuelta electoral prevista para el 19 de noviembre.
Incómodo con el impacto en la participación
“Casi no vine a votar, no había ningún candidato que me representara y no vi que pudiera haber un cambio real después de las elecciones”, confesó ante los comicios. Voz de America Elena Rodríguez, madre de dos hijas, llega a votar a un colegio del barrio porteño de Palermo.
Los expertos dicen que la situación económica ha creado hoy un descontento generalizado. En las primarias de agosto, la participación electoral fue la más baja en 15 años: votó el 70,43% de todos los electores. En años anteriores votó el 76,41% (en 2019), el 74,91% (en 2015) y el 78,66% (en 2011).
El politólogo afirmó: “Durante los últimos ocho años, la sociedad ha tenido la oportunidad de darse cuenta de que quienes están en el poder no pueden resolver el problema, al contrario, centrarse más en las luchas y divisiones, no hace más que empeorar la realidad en Argentina”. y el consultor Francisco Caporiccio.
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