Se trata de La fiesta que sucederá al final de los tiempos. Referirse a nuestra salvación eternaCuando estaremos con Dios en el cielo Seremos siempre felices y completos gracias a Él. “Él enjugará cada lágrima. y no habrá más muerte, ni llanto, ni gemido, ni llanto” (Apocalipsis 21, 4).
Sucederá en Su Segunda Venida. Y los momentos abrumadores -y los muchos miedos- son los más importantes. historia de la humanidad.En ese corto y preciso tiempo La “resurrección de la carne” ocurrirá mientras oramos en doctrina. Y los que sean salvos -resucitados- celebrarán esa fiesta.
Será “fiesta de bodas» (Mateo 22,1-14). Es una celebración de las bodas del Hijo de Dios con la humanidad. Y todos estábamos invitados a esa fiesta. Pero en la descripción de San Mateo Hemos visto que algunas personas no responden a la invitación del Señor. Porque tienen cosas más importantes que hacer: “El reino de los cielos es semejante a un rey que celebra un banquete de bodas para su hijo. Ordenó a sus sirvientes que llamaran a los invitados, pero estos se negaron a ir. Una persona fue al campo. Otra persona fue a hacer recados…”
¡Cuántas veces no hemos hecho lo mismo! Dios nos llama y, en cambio, atiende su invitación.Le dimos la espalda. Dios nos ofrece la oportunidad de unirnos a Su fiesta y disfrutarla para siempre. ¿Y cómo respondemos? Si nos revisamos a nosotros mismos Tomaremos conciencia de la importancia que le damos a las cosas de este mundo y de cómo posponemos o rechazamos las cosas eternas. Lo hacemos cada vez que rechazamos la invitación del Señor.
Personas que prestan atención a las invitaciones y otras actividades. Hay demasiadas personas en riesgo de quedar fuera del partido. Aunque fueron invitados, no lo sabían. La invitación de Dios es más importante que cualquier negocio. sin límites, Cualquier preocupación material, cualquier apego mundano..
Pero existe otro riesgo: vestirse inapropiadamente para esa fiesta. ¿Y qué pasará con esas cosas? Asunto serio: serán expulsados. ¡Pero fueron invitados! El problema es que no vestirse bien significa no prepararse espiritualmente para ser aceptado en la comunidad. Fiesta de la Salvación.
Recordemos que estos eventos se llaman ¡La “realidad última” es inevitable! El primer evento es la muerte. Cuando nuestras almas se separan Nuestros cuerpos luego van al cielo, al purgatorio o al infierno. Del Purgatorio las almas purificadas van al cielo. Y cuando llegue el momento del final La resurrección vendrá. Nuestras almas se reúnen con nuestros cuerpos. Y en aquel tiempo serán las bodas del Cordero sólo para los que sean salvos. porque los malvados serán desechados para siempre.
invitación para ir fiesta del fin del mundo Apto para todos Pero mucha gente no lo acepta… Y algunas personas no están debidamente preparadas. De ahí la conocida frase de Jesús al final de esta parábola: “Muchos son llamados, pero pocos son escogidos.”
Isabel Vidal de Tenreiro
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