La coordinadora general de Equilibrium Vend, Verónica Medina, indicó que, en julio, el 31% de la población adulta expresó la intención de salir de Venezuela en los próximos 12 meses, según la medida mensual de intenciones de emigrar de los venezolanos.
Así lo dijo en una entrevista concedida a Unión Radio. Las autoridades panameñas han reconocido que están al límite de su capacidad para gestionar la crisis migratoria mientras un gran número de migrantes intenta cruzar el Darién para llegar a Estados Unidos.
Estas medidas fortalecerán fronteras, aumentarán las deportaciones, reducirán las estancias de turistas en el país, eliminarán los puestos de control de ayuda humanitaria donde llegan los viajeros, ordenando así el impacto de las pequeñas comunidades por los flujos migratorios.
Medina advirtió que las medidas frenarían el impacto, pero no detendrían el flujo de migrantes.
Explicó que las medidas restrictivas que otros países han tomado en los últimos años han frenado temporalmente la inmigración.
“Uno de los defectos de las políticas de inmigración en estas regiones es que están aisladas, por lo que intentan coordinarse, pero esto es muy difícil de lograr”.
Por su parte, Thomas Page, sociólogo, autor del libro “La Voz de la Diáspora Venezolana”, recuerda que toda inmigración es positiva, un flujo de ideas y productividad.
“Cuando la migración se da en estos niveles hablamos de desequilibrio, pero si los países saben aprovecharlo es temporal, con lo que se multiplica el efecto”.