Venezuela Informa
En algunas zonas de Venezuela -el octavo país con mayores reservas de gas del mundo- el suministro de gas para las necesidades internas es intermitente, pese a que ha asignado a sus funcionarios tres meses para resolver problemas “graves”. Pasaron años de problemas con este servicio.
En mayo pasado, Maduro indicó que los estados afectados eran Yaracuy, Cátira, Carabobo, Barinas, Aragua, Bolívar y Trujillo.
Según el seguimiento realizado por el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP), “aún existen falencias en el servicio de gas doméstico a agosto de 2023” en esas zonas.
Por su parte, la monitora de servicios básicos de la ONG Public Spending Watch, Cedice Libertad, señala que, en promedio, el tiempo de espera para recargar un tanque de gasolina -del que depende la gran mayoría de personas en todo el país- es de hasta dos semanas en zonas urbanas. áreas. regiones, y de tres a cinco en las zonas rurales, por lo que la gente intenta cuantificar los recursos o hacer sus pronósticos.
SÓLO NEGRO
Anabel Rodríguez, coordinadora, dijo a Efe que una de las dos botellas que tiene un comedor social en San Blas, zona de Petare -la favela más grande de Venezuela-, está agotada, y la otra “falta como a dos días”. El espacio proporciona almuerzo a 65 niños de bajos ingresos.
“Para nosotros el suministro de gas es muy importante (…) Muchos de ellos (los niños) a veces vienen aquí sin siquiera haber desayunado en el estómago. Esta comida es su primera comida del día y a veces la única, por eso no paramos y siempre encontramos la manera.”
Explicó que, en esta comunidad, pueden pasar al menos un mes sin poder recargar las pilas y no siempre están al alcance de todos los vecinos. La última vez que pudieron hacerlo oficialmente fue el 31 de julio.
“Lo que nos causa problemas es que a veces se nos acaba el suministro de gas y no tenemos suficiente para cocinar”, afirmó.
Para “continuar el servicio de comedor”, dijo, tuvo que recurrir al mercado negro, donde se compraba una bombona de 10 kilogramos por 30 bolívares (92 centavos de dólar) a través de canales oficiales. 5 y 10 dólares.
“Tenemos compañeros que cocinan con leña en su zona, pero aquí no tenemos el espacio, un terreno para cocinar con leña”, dijo.
Los tiempos de espera son mayores en una localidad de Aragua (norte), donde a los vecinos se les pide que recarguen sus botellas “cada dos meses aproximadamente” y tras la entrega tienen que esperar “hasta dos semanas” para recibirlas llenas. Además, sólo permiten un cilindro por familia, dijo a Efe un vecino.
Según el Superintendente de Servicios Básicos, entre el 20% y el 30% de la población recibe gas directamente, y el resto depende de cilindros de gas.
Una encuesta reciente realizada por el observatorio a 2.300 personas en ciudades y zonas rurales encontró que el 60% de los venezolanos considera que el proceso de llenado del tanque es “inestable e incierto”.
Además, el 65% de las personas optó por pagar tasas extra para “disfrutar de incentivos de oferta”.
PEQUEÑA MEJORA
El investigador del Observatorio del Gasto Público, Raúl Córdoba, dijo a Efe que, en general, “las fallas continúan”, aunque recientemente ha habido “señales de mejora”, lo que ha llevado a “un aumento en el número de fallas”, con una frecuencia “de una o hasta dos”. “. días” en algunas áreas.
Sin embargo, el largo tiempo de espera obligó a la gente a “utilizar cocinas eléctricas” y “en algunos casos a utilizar leña o fuego improvisado”.
Además, muchas botellas están “obsoletas”, “degradadas” y no han sido reemplazadas. Asegura que la empresa que puede producirlos, la estatal Siderúrgica del Orinoco (Sidor), está “teniendo problemas de inversión” para producirlos.
Según el estudio, “sólo 2 de cada 10 cilindros tienen nuevo diseño y tecnología”.
Según Córdoba, las tres acciones necesarias para restablecer el servicio son diagnóstico de fallas, inversión y “revisión del esquema” de tarifas de atraso, fijando precios que cubran los costos de operación y mantenimiento.
Venezuela tiene reservas de gas “importantes”, que ascienden a 196 billones de “pies cúbicos convencionales”, lo que sitúa al país “entre los 10 primeros del mundo”.
El chavismo atribuye este y otros problemas a las sanciones internacionales, lo que también es desestimado por analistas, empresarios, opositores y diversas ONG, que piden su retirada.
Con información de Venezuela Informa