Al menos 5.341 mujeres fueron reportadas como desaparecidas entre enero y junio de 2023 en Perú, unos 200 casos más que en el mismo período hace un año, informó este lunes la ONG CHS Alternativo, utilizando Diario Informe de la Policía Nacional.
Esto representa el 59,7% de todos los casos registrados en los primeros seis meses del año, cuando las autoridades recibieron un total de 8.937 reportes de personas desaparecidas, detalló CHS Alternativo en un comunicado.
La organización consideró destacable que “entre los reportados como desaparecidos, al menos 100 son niñas y adolescentes de nacionalidad venezolana”.
De los 7,3 millones de venezolanos que han dejado su país debido a la crisis que atraviesa el país, cerca de 1,5 millones han emigrado a Perú, lo que lo convierte en el segundo país que más ciudadanos venezolanos recibe después de Colombia.
En opinión de la presidenta de CHS Alternativo, Andrea Querol, “las cifras revelan que, en el caso de Perú, las personas desaparecidas en su mayoría tienen rostro de mujer”.
Explicó que en territorio peruano las desapariciones están particularmente relacionadas con el delito de trata de personas o alguna forma de explotación humana.
Para unir esfuerzos y trabajar para que los casos de desaparición puedan ser tratados de manera rápida y eficiente, y prevenir futuras desapariciones, ocho organizaciones de diferentes países del mundo establecieron recientemente la Red de la Asociación Internacional de Personas Desaparecidas (RIAPD).
Para Querol, la RIAPD aclarará la relación directa que existe entre la afectación a los derechos humanos en la región y situaciones como la violencia de género, las desapariciones forzadas o la trata de personas, y contribuirá al intercambio de experiencias para mejorar la búsqueda y mecanismo de identificación.
El objetivo es “brindar apoyo emocional a las familias de los desaparecidos y fortalecer el proceso de denuncia e investigación en cada país”.
La RIAPD pretende compartir métodos de trabajo, como protocolos de actuación o cursos de búsqueda, y promover iniciativas internacionales que aumenten la difusión de alertas y permitan la prevención mediante el uso de herramientas digitales.
En este sentido, uno de los primeros proyectos que comparten es la búsqueda por reconocimiento facial, que llevó a cabo la Asociación SosDesaparecidos en España el pasado mes de marzo.