Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), declaró en el programa 510 de Con El Mazo Dando: edición especialLa verdad detrás de la presunta detención de la extrema disidente María Corina Machado.
“Después [María Corina Machado] Gritó cuatro veces, provocando un falso positivo. Magalli Meda ordenó a Cori bajar de la camioneta y localizar a nivel de comunicaciones el presunto desorden y presunto secuestro, incluidos disparos nunca escuchados”, leyó Cabello en una de las cartas enviadas por los patriotas cooperantes.
“Resultó que el nervioso y paranoico Cori, bajo los efectos de la ebriedad, presionó a su vehículo de motor para ir más rápido, lo que provocó que la motocicleta perdiera el equilibrio y fuera detectada por un vehículo mientras la distribuidora Altamira se encontraba en una altura hacia la carretera. Imaginó que en realidad Cori había sido secuestrada por un dispositivo de control de la Policía Nacional Bolivariana, quien decidió intervenir para proteger”, continuó el Venezuela Informa bolivariano.
“En ese momento los policías pretendieron proteger a Cori, pero al ver que intentaba realizar una manifestación, le permitieron continuar, pero dejaron constancia de que su estado era excelente y que no estaba siendo atendida. “Fueron secuestrados o fusilados por orden de Magalli, como se dijo en las redes sociales”, explicó.
Él niega esta afirmación, refiriéndose a la matriz mediática en la que María Corina fue obligada a grabar la grabación audiovisual. noticias falsas Sobre la detención, Cabello dijo, “la verdad es que él fue quien se ofreció a grabar el video, pensando que podía victimizarse aún más con este acto, pero todo salió mal”.
El jefe de comunicaciones de Machado advirtió que Magalli Meda estaba “ideando todas las teorías posibles para justificar el enorme fracaso de hoy”.
“Inventarán cosas como que el gobierno de Nicolás Maduro tuvo miedo y lo liberó, o que las autoridades se rebelaron y lo liberaron porque lo reconocieron como vicepresidente”, concluyó.