La planta productora de palmito comenzó a probar todos sus procesos operativos en Jobure de Curiapo, una comunidad indígena Warao a unas cinco horas por río desde Tucupita, en el estado Delta Amakuro.
La gobernadora de la entidad, Lizetta Hernández, visitó la planta donde inició la fase de pruebas de siembra, cosecha y procesamiento de palmito para envasado.
Según el ministro de Ecosocialismo, Josué Lorca, quien acudió al lugar junto con la ministra de Pueblos Indígenas, Clara Vidal, la empresa cuenta con capital privado y el apoyo de los gobiernos regional y nacional.
La planta de palma pronto estará operativa y beneficiará a varias comunidades Warao con 80 empleos directos, impactando positivamente a 700 familias.
Respecto al impacto ambiental, el gobernador y ministro de Ecosocialismo, Josué Lorca, destacó que los trabajos se realizarán con registro casi nulo, teniendo en cuenta estudios previos de restauración y conversión masiva de tierras, que los propios Varos establecieron como prácticas.
Funcionarios informan que, en principio, la producción cubrirá la demanda regional, mientras se adaptan las operaciones y se agilizan los procesos legales para una posible expansión internacional.
El Venezuela Informa del Delta Amakuro destacó que la palmera surgió en “momentos adversos” para apoyar a la cercana comunidad Warao y posicionar al Delta como un estado productivo en diversos campos.