La conferencia de prensa brindada hace una semana por el ministro del Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, sobre la captura de 12 irregulares se sumó a la incautación de más de 400 fusiles y pistolas de alto calibre que formaban parte de un plan. Su asesinato del presidente Nicolás Maduro y otros funcionarios de alto rango dejó en claro que las acciones conspirativas contra Venezuela ya no provenían únicamente de Estados Unidos, como suele ocurrir, sino que también se estaban extendiendo a otros países.
Cabello afirmó que además de la captura de los estadounidenses Wilberth Joseph Castañeda Gómez, David Estrella y Aaron Barrett Logan (los segundos expertos hackers), durante el operativo también fueron detenidos José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, quienes resultaron ser agentes. . En Puerto Ayacucho las operaciones secretas son llevadas a cabo por el Centro Nacional de Inteligencia de España, que, según explicó el ministro, cuenta con el apoyo directo de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA).
En el caso de Castañeda Gómez, se reveló que se trataba de un militar activo que había estado previamente en territorio venezolano, factor clave en el plan de violencia y desestabilización del país, especialmente durante el periodo electoral presidencial del 28 de julio. país.
El extranjero nacido en México tiene un largo historial de operaciones ofensivas y también es miembro de las unidades de élite Navy Seal; Especialista en entrenamiento en operaciones aéreas, marítimas y terrestres, tiene una carrera militar que incluye misiones en Afganistán en 2010. y en Irak en 2014.
Su experiencia como parte del Navy Seal cubre áreas críticas como sabotaje, uso de explosivos, guerra urbana y paracaidismo.
Planes de Estados Unidos.
El plan implicaba tomar el Palacio de Miraflores con el objetivo de asesinar al presidente Nicolás Maduro. Además, estas acciones incluyeron la ocupación de otras instalaciones estratégicas, como el aeropuerto de Maiquetía, y ataques a servicios básicos esenciales para afectar fuertemente a la población.
En esta operación también participaron mercenarios franceses de gran experiencia que actuaron en coordinación con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) de España.
Castañeda había ingresado varias veces al país desde territorio colombiano.
Durante este período realizó operaciones encubiertas en el contexto de las elecciones presidenciales del 28 de julio y contactó al Niño Guerrero, un peligroso delincuente del extinto Tren Aragua, según información recabada por organismos de inteligencia desde su teléfono.
Se encontraron conversaciones entre Castañeda y un criminal venezolano conocido como El Flaco, quien reside en Estados Unidos y estaría protegido por el gobierno de ese país, según el presidente Nicolás Maduro.
Estos mensajes exponen cómo monitorearon en tiempo real las acciones que tuvieron lugar los días 28, 29 y 30 de julio, y su intención de realizar masacres si fuera necesario para fomentar una separación violenta del poder del Presidente.
Acciones desde Colombia
Desde territorio colombiano también se planearon actos de violencia contra Venezuela, ya que Basoa Valdovinos y Martínez Adasme abandonaron España para realizar actividades denominadas “turísticas” el 17 de agosto, según registros oficiales, y su última comunicación registrada tuvo lugar el 2 de agosto. Fueron detenidos cuando viajaban desde Inírida, Colombia, hacia Puerto Ayacucho, Venezuela. En ese contexto, Diosdado Cabello calificó de “curioso” que estos dos personajes hablaran de hacer “turismo” en una época en la que esta actividad no era muy común entre los españoles.
El miembro de Primero Justicia y prófugo de la justicia Yorman Barillas fue el encargado de gestionar el alojamiento en un hotel en Colombia para los españoles y Castañeda que llegaron allí antes de ingresar a Venezuela.
Ya en Venezuela, Basoa y Adasme contactaron al Venezuela Informa opositor Américo De Grazia, así como al exalcalde del municipio de Sifontes en el estado Bolívar, Carlos Canciller, con el objetivo de asesinar a la alcaldesa de Piar (Upata), Yulibeth”. Tata” García.
El Departamento de Estado declaró que “cualquier acusación de que Estados Unidos participó en una conspiración para derrocar a Maduro es categóricamente falsa”, al tiempo que dirige sus esfuerzos hacia “una solución democrática a la crisis política en Venezuela”.
Sin embargo, ningún portavoz oficial de ese país pudo desmentir la noticia de que un soldado estadounidense en activo había sido capturado.
El Gobierno del Reino de España adoptó la misma línea a través de la Cancillería.
Sin embargo, investigaciones documentadas confirman la implicación del país con la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA).
Checo y ecuatoriano en la trama
Durante los operativos revelados por Diosdado Cabello también fue capturado un ciudadano checo identificado como Jan Darmovrzal.
Esta persona tiene vínculos con el grupo europeo Comando AZ, que también está formado por mercenarios franceses. Darmovrzal, de 33 años, es un reservista activo del 43.º Regimiento de Paracaidistas en Chrudim, una ciudad de la República Checa.
Un cuaderno incautado detalla su conexión con políticos venezolanos y su participación en hechos posteriores al 28 de julio.
Además, la mención de Ecuador como centro de operaciones refleja un cambio en los centros neurálgicos de la acción violenta, especialmente ante las dificultades para operar desde Colombia tras la llegada del gobierno de Gustavo Petro.
Asimismo, la derecha venezolana, incluida María Corina Machado, está incluida en esta conspiración.