Según medios estadounidenses, el asistente personal del actor Matthew Perry se declaró culpable de “conspiración para distribuir” ketamina en relación con la muerte del actor.
Kenneth Iwamasa, de 59 años, afirmó que “inyectó ketamina a Perry repetidamente sin ninguna indicación médica” y admitió haberla inyectado “múltiples veces” el día de su muerte, según el Departamento de Justicia.
La declaración de Iwamasa se produjo luego de conocerse que cinco personas fueron acusadas de ser parte de la red de suministro del actor: dos médicos, una “importante fuente de suministro” de la droga conocida como la “Reina de la Ketamina” y varios intermediarios que, según informes federales. El fiscal Martín Estrada, le suministró ketamina a Perry “que aprovechó”.
“Estos acusados se aprovecharon del problema de adicción del señor Perry para enriquecerse. Sabían que lo que estaban haciendo estaba mal y representaba un gran peligro para el señor Perry, pero lo hicieron de todos modos. En última instancia, estos acusados se preocupan por su bienestar. Chey estaba más interesado en lucrar a su costa”, añadió Estrada al anunciar los cargos.
El pasado mes de diciembre, la Oficina del Médico Forense de Los Ángeles reveló en su informe de la autopsia de Perry que el actor murió por “efectos agudos de la ketamina”, un fármaco utilizado para tratar la depresión y la ansiedad, y “el posterior ahogamiento”.