El candidato opositor Antonio Ecarri calificó de “acusación absurda” y “cobardía electoral” las “ausencias” observadas el pasado jueves en el CNE cuando firmaban el documento en el que se comprometían a respetar los resultados electorales.
Ecarri advirtió que “pueden abandonar el proceso de selección por mala crianza, esto es morder los peines, política de morder los peines, llevan 25 años mordiéndose los peines” y afirmó que el país no puede tolerar otro “naufragio”. , otra derrota y otra venganza”.
El dirigente de Alianza Lápiz señaló que “Edmundo” no puede seguir la política de “el perro que se muerde la cola” y advirtió que esa fue la actitud adoptada en el marco de las elecciones para gobernador del estado Zulia. a su juicio, “se perdió por una mala crianza”.
La pobreza es cobardía.
Ecarri también se refirió a su etapa como dirigente estudiantil, afirmando que siempre le encantó dar la cara.
“Discute siempre cara a cara, habla cara a cara con tus oponentes, habla cara a cara con los grupos, porque a través del diálogo se entiende a la gente, porque se entiende a la gente al mirarse a la cara, y este país necesita comprensión”. ,” él dijo.
Advirtió que “si no van” él liderará la pacificación del país y el cambio pacífico.
“No me gusta especialmente esta política de ausencia”, observó, “porque para mí la ausencia huele a cobardía. Es una muy mala señal, lo que pasó ayer es una muy mala política en términos de no ver las caras de los candidatos en “No podemos evitar la discusión, no vernos las caras”, enfatizó.
Ecarri cree que es necesaria una reunión para lograr un “cambio pacífico”.
Cambio sin sangre
El candidato opositor se manifestó a favor de un cambio pacífico “sin que se derrame una sola gota de sangre, sin derramar una sola lágrima”.
Por ello, afirmó que para lograr el cambio que desea es necesario no “morderse el peine, sino superar” los obstáculos que hay que superar.
Sostuvo que la “vieja oposición venezolana” enfrentaba un serio problema para impulsar su política de “perro que se muerde la cola”.
Ecarri dijo que uno de los que no estuvo en el acto “no fue porque le dieron órdenes de no ir” y el otro “no fue porque quería ocupar el lugar del otro”.
Según el político, el incidente fue “un acto de regaño público, de inmadurez, de incompetencia y de frivolidad”.
Afirmó que la paz no significa rendirse y sostuvo que “hay que entender muchas cosas”. pero tolerancia, sobre todo, respeto.
Destacó que estaba a favor de un cambio que sólo podría ocurrir por medios democráticos, como “Nicolás se va y no regresa”.
Advirtió contra confiarle “la violencia y asuntos que sólo pagan los hijos de los más pobres”.
“Para mí, este es el inicio de una fase democrática en la que todos los sectores convivirán sin ser excluidos”, afirmó.
Dijo que los desafíos son enormes: “Hay malas intenciones, hay intenciones traicioneras que se guardan debajo de la mesa, pero trabajaremos por lo que creemos, por la política de la democracia, donde todos los factores, ningún tipo, existen”. Hay exclusión política”.