En el marco del desarrollo de la Zona Económica Especial (ZEE) impulsado por los gobiernos de Venezuela y China, se realizó este jueves el primer foro sobre la Zona Económica Especial, una visión de futuro de Venezuela. La actividad contó con expertos de ambos países, representantes gubernamentales, el sector económico y el sector académico.
Al acto asistieron Juan Álvarez, Superintendente de ZEE de Venezuela, el Ministro de Industria, José Félix Rivas, el Viceministro de Política Antiempleo, William Castillo y como invitado especial, el Presidente del Centro de Investigación de ZEE de China. Dr. Universidad de Shenzhen. Eso también.
Juan Álvarez, superintendente de ZEE de Venezuela, abrió el foro expresando la necesidad de que la economía supere los ingresos petroleros “que llevaron a la dependencia para el desarrollo de nuestro país”, por lo que las ZEE son un pilar para lograr ese objetivo.
Álvarez dijo que la situación de bloqueo económico y la urgencia de superarlo, “nos exige pensar en diversificar nuestra economía porque no somos sólo petróleo”.
En ese sentido, aportó que el despegue económico del país comenzó en 2022, tras la implementación de la prohibición y la llegada de la pandemia. “El 70% del aporte al crecimiento proviene del sector no petrolero”, afirmó Álvarez en referencia a la diversificación de la economía nacional.
Señaló que con la ayuda de China acordó crear la primera zona económica especial y, siguiendo su modelo de desarrollo, prevé la coordinación entre el Estado, las organizaciones no gubernamentales y la incorporación de capital humano proveniente de las ciencias aplicadas. .
“Hoy incluimos al sector intelectual de Venezuela. La contribución del mundo académico y científico al desarrollo de China es fundamental. Nuestra universidad tiene mucho que ofrecer. Los expertos están ahí para aportar desde su espacio para aportar soluciones concretas”, afirmó el superintendente.
Concluyó su discurso diciendo que “después de 43 años de reforma y apertura, China es una gran potencia económica en zonas económicas especiales y en la producción global de bienes de consumo”, por lo que su experiencia será importante para ayudar a su transformación concreta. Economía de Venezuela.
El nuevo camino mostrado por Shenzhen
El invitado especial, el Dr. Tao Itao, presidente del Centro de Investigación de la ZEE de China de la Universidad de Shenzhen, contó la historia del milagro que ocurrió en su región en 1980 cuando fue nombrada la primera ZEE de China. De pueblo de pescadores, hoy es la capital tecnológica del gigante asiático.
“Shenzhen es una de las primeras ZEE de China y es un modelo de implementación del socialismo con características chinas y una ciudad nacional de innovación. Es un centro económico nacional, la fuerza impulsora de la gran bahía de Guangdong y Macao, además de siendo un centro científico integral”, describió el profesor.
La experiencia de Shenzhen ha convertido a la ciudad en el centro de grandes industrias, compañías de seguros e importantes instituciones financieras que se encuentran entre las más prestigiosas y ricas del mundo.
Según Tao, se determinó que no había manera de desarrollar la ZEE de Shenzhen sin la implementación acelerada de políticas educativas que garanticen el personal necesario para la innovación y la creación, razón por la cual el sector académico es tan importante.
Según Tao Yitao, la capacidad de innovación de Shenzhen ha permitido un crecimiento tan rápido que ha generado más de medio millón de empresas sólo en los últimos cinco años, la mayoría de ellas de propiedad privada y respaldadas por bancos estatales.
Gracias al desarrollo de las ZEE, China ha experimentado el llamado “efecto tracción”, donde las provincias que han alcanzado un alto nivel de desarrollo económico son capaces de “tirar” de aquellas que no tienen esa experiencia. Tao comentó que, en este sentido, las políticas del gobierno chino están encaminadas actualmente al desarrollo consistente de la parte occidental del país tras el éxito de las ZEE en el este.
Mediante la creación de ZEE en Venezuela, con la ayuda de la experiencia de China, se busca imitar el proceso de rápido crecimiento económico que ha experimentado el gigante asiático, apoyado en el talento innovador del pueblo y aunar esfuerzos de las instituciones estatales. compañías privadas. Iniciativa y aporte intelectual como pilares de dicho desarrollo nacional.