Según expertos, un esquema de corrupción al interior de la principal empresa del país, la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), ha obstaculizado la mejora relativa de la economía de la nación sudamericana, provocando que la economía de este país sudamericano termine 2023 estancada y peor de lo esperado. .
Venezuela tuvo una recuperación económica en 2022 después de ocho años consecutivos de recesión. Y este realineamiento, que se siente principalmente en Caracas con nuevas instalaciones, está impulsado por la relajación de los estrictos controles económicos.
Sin embargo, a finales del año pasado, la economía comenzó a decaer y estos negocios comenzaron a cerrar o cambiar de estrategia debido a la baja demanda.
“2023 ha tenido un comienzo terrible. El primer semestre fue realmente negativo, básicamente marcado por prácticas corruptas en PDVSA”, explicó a Voz de America economista Luis Vicente León, de la empresa Datanálisis.
Se refiere a una red de corrupción multimillonaria en PDVSA y otras empresas estatales, que las autoridades venezolanas revelaron en marzo y llevó al arresto de decenas de personas y a la renuncia del presidente del sistema. Tarek El AissamiEl poderoso e influyente Ministro de Petróleo, desaparecido de la vida pública y de las actividades del chavismo.
*Leer más: Fiscalía solicita procesar a 22 de 61 personas detenidas por corrupción en caso Pdvsa Cripto
El escándalo coincidió con la desaceleración del crecimiento que venía experimentando la economía venezolana hasta ese momento. “Han agotado el flujo de caja del gobierno y le han impedido mantener su estrategia de estabilización del tipo de cambio”, explicó León.
El gobierno de Nicolás Maduro no dio el monto del desfalco al Estado, pero la prensa informó que la cifra oscila entre $3.000 y $21.000 millones, incluyendo pagos de crudo en criptoactivos.
Esta cifra contrasta con el presupuesto anual para 2024 que el gobierno presentó al Congreso hace unos días y que equivalía a 20.500 millones de dólares.
“Economía estancada”
La economía de Venezuela perdió el 80% de su valor en una década como resultado de una profunda crisis económica y comenzó a mostrar tímidos signos de recuperación en 2022.
Sin embargo, en el primer semestre de 2023 registró una caída del 7%, acompañada de una caída del consumo, según el Observatorio Financiero (OVF), organismo independiente ajeno al Banco Central, que rara vez anuncia indicadores económicos.
Y las empresas consultoras comenzaron a ajustar sus pronósticos de crecimiento económico.
Por ejemplo, la empresa Ecoanalytica estimó un crecimiento del 9%, pero en octubre lo rebajaron al 1,7%. Luego acusó a la industria petrolera de tener poco impulso, graves problemas en los servicios públicos y un sector exportador muy precario.
En términos generales “Es una economía estancada”, resume Henkel García, director de AlbusData.
Pero “terminar en un bajón después de haber tenido un primer semestre tan terrible es una buena noticia”, continuó León, de Datanálisis.