En junio de 2024, México deberá decidir quién sucederá al actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, al finalizar su mandato único, y esta vez las favoritas serán dos mujeres.
En México, las primarias presidenciales para las elecciones de junio de 2024 finalizaron el 6 de septiembre y sus resultados fueron únicamente para mujeres. Por la izquierda, la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, es nominada para enfrentar a la senadora Xóchitl Gálvez, candidata de la oposición de derecha.
En junio de 2024, México deberá decidir quién sucederá al actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, al finalizar su mandato único, y esta vez las favoritas serán dos mujeres. Algo bastante especial en México: nunca antes las mujeres habían estado tan cerca de la presidencia.
Tal como auguraban las encuestas, fue Claudia Sheinbaum, de 61 años y exalcaldesa de la Ciudad de México, quien el miércoles 6 de septiembre ganó la candidatura del partido de izquierda Morena con el 39% de los sufragios.
Claudia Sheinbaum, heredera del Presidente de México
Claudia Sheinbaum siguió claramente los pasos del Gobierno mexicano y el movimiento iniciado por Andrés Manuel López Obrador, quien también fue su protegido. Como alcaldesa, aplicó sus políticas a nivel local y, como él, estuvo comprometida con una agenda social. Durante sus mítines prometió continuar en la misma dirección y esperaba capitalizar su gran popularidad entre los mexicanos.
“Claudia Sheinbaum representará la continuidad en el proyecto del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, el presidente que ha llegado a mayores niveles de legitimidad desde que inició la transición y que los mantiene hasta la fecha la tasa de aceptación ronda el 70%. Me parece que Claudia es parte del grupo que junto al presidente construyeron el proyecto de la Cuarta Transformación, y lo que intentan es mostrarle al pueblo que no es su carácter sino que es un proyecto político. “, analizó. Adriana Báez, Politólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“En este caso, el género no es un factor para determinar si las elecciones presidenciales serán exitosas o no. Me parece que ese es el proyecto que ha puesto en marcha el actual presidente. Dicho esto, su continuidad tiene muchos seguidores, principalmente porque tiene agendas sociales universales. Sin embargo, también tuvo algunas decisiones que provocaron divisiones, especialmente con la clase media”, continuó el politólogo.
El caso Ebrard
Según Báez, la pregunta es “qué pasará con Morena cuando el presidente ya no esté, porque fue su carácter el que atrajo, por así decirlo, tanto apoyo a su partido”.
Sin embargo, el acto realizado ante la prensa estuvo marcado por la ausencia del principal oponente de Sheinbaum, Marcelo Ebrard. El exsecretario de Estado sólo obtuvo el 25% de los votos. Denunció fraude en el proceso de selección de candidatos, pero el partido rechazó esa opción y consideró definitivo el resultado.
El politólogo estima que “lo más probable es que esto termine en una ruptura, a menos que Claudia haga algún tipo de anuncio que calme la situación. En caso de ruptura, la pregunta es a quién beneficiará y a quién perjudicará. Hay opiniones encontradas. Hay quienes dicen que le quitará votos a Morena”.
Por la derecha, la decisión está tomada: Xóchitl Gálvez, de 60 años, entra en carrera. El senador del PAN (Partido Acción Nacional) prestó juramento oficialmente el pasado domingo en la Ciudad de México.
En un país sexista como México, con una enorme tasa de criminalidad contra las mujeres y más de 10 feminicidios por día, tener dos mujeres liderando la carrera presidencial es crucial y creará una característica especial para esta elección. “Creo que las mujeres se beneficiarían mucho si una mujer llegara a la presidencia, sea cual fuere de las dos fuerzas afortunadas que compitan”, concluyó Adriana Báez.
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