Alejandro Fernández se encuentra de gira por España y desde allí ha llamado la atención de sus fans, y no por su forma de cantar o el espectáculo que da en su presentación. Se trata de sus largas uñas, lo que causó indignación entre sus seguidores, quienes de inmediato le pidieron que se contactara con su manicurista.
El Potrillo realiza conciertos en el Viejo Continente y, a juzgar por las fotos que comparte en su perfil de Instagram, también aprovecha para grabar algunas de sus producciones mientras aparece en un estudio y comparte comida con los miembros de su equipo.
Aparentemente, los comentarios sobre esas imágenes se redujeron a dos cosas básicas: el contenido de su próximo álbum y las largas uñas postizas que hace alarde.
“Esa manicura es lo mejor, dame el teléfono de tu manicurista”, se podía leer uno de los comentarios que le hicieron a Alejandro.
“Si garras así, ya me imagino los rollos”, comentó uno de sus seguidores. “Es posible ser más travieso que tú, ven, dime qué comerte los dedos y las bolas. Claro que eres única, tú y tus cosas, la nena de mi vida…”, fue otro comentario, un poco más atrevido. Lo más interesante fue que no se trataba de uñas acrílicas o materiales similares, sino que imitaba su manicura a partir de restos de percebes, un crustáceo marino que se forma sobre las rocas azotadas por las olas y se utiliza en platos exóticos que deben cocinarse con mucha Se debe porque su tiempo de cocción es de alrededor de un minuto, lo que la ha hecho muy popular por su buen sabor, según expertos culinarios.