Según un informe del Consejo de las Américas y Control de Riesgos, Venezuela tiene la capacidad más baja para detectar, sancionar y prevenir la corrupción en la región. El país obtiene el peor puntaje en el Índice de Competencia Anticorrupción (CCC), que mide el desempeño de los países en varias dimensiones relacionadas con la transparencia y el estado de derecho.
El informe, publicado anualmente desde 2019, señala que Venezuela se ha quedado atrás en todas las categorías evaluadas en 2023, después de haber mostrado un progreso modesto en 2022.
Entre los factores que explican este declive están la represión de la sociedad civil y los medios de comunicación, la falta de independencia del poder judicial y la falta de rendición de cuentas de las autoridades.
El CCC asigna una puntuación a cada país de 0 a 10, siendo 10 el mejor resultado posible. Venezuela alcanzó 1,46, el más bajo de la región y muy por debajo del promedio regional de 4,55. Los países que le siguen en el ranking son Guatemala (2,86) y Bolivia (2,56).
En el otro extremo se encuentran Uruguay (6,99), Costa Rica (6,76) y Chile (6,67), que cuentan con la mayor capacidad anticorrupción de América Latina. Estos países se caracterizan por instituciones fuertes, una prensa libre y una sociedad civil activa.