Venezuela. Ratsali Acero (18), residente del estado Apu, partió como muchos venezolanos con la intención de alcanzar el sueño americano, pensando que no perdería la vida.
Personas cercanas a Creole dijeron que la niña cruzó todo el río Darién.
Llegó a México y recibió un permiso de residencia permanente que lo mantendría en ese país por un corto período de tiempo.
Durante este período, la niña se dedicó al trabajo con la intención de retomar la aventura en los Estados Unidos.
Cuando termina su paso por el país azteca, Acero decide trasladarse hacia la frontera, pero su salud se deteriora, ya que presenta vómitos y diarrea.
Estaba internado en un centro asistencial mexicano, donde perdió la vida el viernes 26 de mayo.
Según los médicos, contrajo una bacteria después de beber en un río mientras viajaba por la selva del Darién. Dejó dos niños huérfanos.
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